En el evento de lanzamiento, realizado el martes 20 de julio en el Salón de los Científicos de la Casa Rosada, expusieron el Presidente de la Nación Alberto Fernández, el Secretario de Asuntos Estratégicos, Gustavo Béliz, y expertos internacionales en Ciencias del Comportamiento. A su vez, la economista líder de la División de Protección Social y Salud del BID, la Dra. Florencia López Boo, y el Dr. Fernando Torrente, Director del Instituto de Neurociencias y Políticas Públicas de la Fundación INECO, presentaron casos de intervenciones exitosas.
Nos complace particularmente comunicar que la Fundación INECO, junto con el Banco Interamericano de Desarrollo, participó del evento de lanzamiento de la Unidad de Ciencias del Comportamiento y Políticas Públicas, una iniciativa del Consejo Económico y Social que funcionará bajo la coordinación de la Secretaría de Asuntos Estratégicos de la Nación y en la cual la Fundación ha venido colaborando para su concreción.
La Unidad tiene como objetivo impulsar proyectos de políticas públicas basados en estudios del comportamiento humano. La premisa es estudiar cómo pequeños cambios en el contexto pueden traer grandes beneficios en la vida de las personas. Investigar cómo los seres humanos tomamos decisiones –muchas veces no es de la manera racional que tanto nos gustaría– , puede ayudar a diseñar políticas públicas de bajo costo de implementación y que tengan un gran impacto en el bienestar de toda la sociedad.
La Unidad de Ciencias del Comportamiento y Políticas Públicas estará integrada por una red de expertos y expertas en diversas disciplinas y buscará articular la investigación con los programas de gobierno.
Desde el 2018 la Fundación INECO ha venido trabajando junto con el BID en una cooperación técnica con el objetivo de impulsar la investigación en ciencias del comportamiento en toda Latinoamérica y desarrollar políticas que puedan impactar positivamente en la vida de las personas. El hecho de que esta sinergia se haya cristalizado en una política de estado que genere intervenciones a muy bajo costo y de muy alto impacto a mediano y largo plazo nos llena de orgullo y nos pone ante un desafío: continuar desarrollando investigación de la más alta calidad y profundizar en las tareas de diseminación sobre las potencialidades de estas herramientas.
En el evento de lanzamiento, que se realizó el martes 20 de julio en el Salón de los Científicos de la Casa Rosada y que contó con expertos internacionales y las frases finales del presidente Alberto Fernández, el Dr. Fernando Torrente, Director Científico de la Cooperación y del Instituto de Neurociencias y Políticas Públicas expresó: “Estamos muy honrados de apoyar esta iniciativa porque creemos que la creación de esta Agencia es un hito muy importante para la Argentina y va a permitir a los que trabajamos en las ciencias del comportamiento articular esfuerzos para mejorar las políticas públicas.”
El Dr. Torrente dialogó con la Dra. Florencia López Boo, economista líder de la División de Protección Social y Salud del BID y también directora de la Cooperación, y en conjunto presentaron algunos casos de éxito que ya se han realizado en el país. Uno de los ejemplos en los cuales un pequeño empujón, o “nudge” como se dice en inglés, ha sido efectivo, es la intervención realizada con médicos y médicas de PAMI para reducir la prescripción de un medicamento muy utilizado para tratar trastornos cognitivos pero que carece de evidencia científica de su funcionamiento para este fin. Simplemente mandando un correo electrónico con información actualizada sobre el uso de esta droga y con un mensaje comparando el nivel de prescripción de cada médico con sus colegas –lo que se denomina “norma social”–, se pudo reducir la tasa de indicación de este medicamento. De esta forma, una intervención sencilla y de bajo costo tuvo un impacto, no solo en la salud de los pacientes, sino también en la economía del sistema sanitario.
Video proyectado el día del evento en el que el Dr. Fernando Torrente explica la intervención y el ensayo controlado y aleatorizado que realizó la Fundación INECO junto con PAMI y que se publicó en una revista científica de muy alto impacto (si querés saber más sobre la investigación y ver el artículo publicado podés seguir leyendo acá).
Gustavo Béliz, Secretario de Asuntos Estratégicos de la Nación, se mostró muy entusiasmado con impulsar la iniciativa desde el Consejo Económico y Social y señaló: “en general las ciencias del comportamiento son muy tenidas en cuenta por la política cuando llega el momento de una campaña electoral: hay mucho interés en las encuestas y en cómo reacciona la población. Sin embargo, hay poca atención de estas cuestiones cuando se trata de diseñar políticas públicas pensadas para que tengan un mejor nivel de impacto, refinarlas con un sentido mayor de humanidad y de personalización.” En este sentido, Béliz mencionó la importancia de generar intervenciones estatales más humanizadas que tengan en cuenta las emociones, las percepciones, los prejuicios y los sesgos cognitivos que tienen las personas. “Esto es posible hoy en día ya que contamos con una cantidad insospechada de datos que cada uno de nosotros genera diariamente a partir de la tecnología”, agregó.
Por su parte, Iván Budassi, Director Nacional de Análisis Estratégicos y quien estará a cargo de la Unidad, sostuvo que cuando se planifica una política pública siempre se suele suponer que las personas actuamos de manera consciente, reflexiva, meditada, es decir “pensamos que pensamos”. Lo interesante que ponen en evidencia las Ciencias del Comportamiento es que si bien a veces realizamos este tipo de pensamiento, quizás la mayoría de las veces reaccionamos de diferente manera: automática, no tan reflexiva o sesgada por algún error. “No solo estos sesgos nos hacen equivocarnos de una manera consistente y son sistematizables, sino que también pueden ser estudiados y ser utilizados para mejorar las políticas públicas”, mencionó Budassi. Y a su vez agregó que, si bien las personas en todo el mundo tenemos características similares, puede haber diferencias en los hábitos y costumbres. De ahí la importancia de realizar investigaciones locales y no aplicar directamente estudios realizados en otras partes del mundo con otras idiosincrasias.
Resumen del evento de lanzamiento de la Unidad de Ciencias del Comportamiento y Políticas públicas realizado el martes 20 de julio en el Salón de los Científicos de la Casa Rosada.
En el resto del mundo ya son varios los países que utilizan las ciencias del comportamiento en la formulación de sus políticas. Desde que Reino Unido lanzó la primera unidad de conocimientos del comportamiento humano en 2010, el Behavioral Insights Team, numerosos gobiernos como los de Dinamarca, Singapur, Canadá, Estados Unidos, Australia y Perú han imitado la iniciativa. Durante el evento, Budassi dialogó con Cass Sunstein, fundador y director del Programa de Economía del Comportamiento y Políticas Públicas de la Facultad de Derecho de Harvard, asesor del presidente de Estados Unidos Joseph Biden y uno de los autores del libro fundacional “Nudge: mejorando las decisiones sobre la salud, la riqueza y la felicidad”.
Durante la presentación, Cass Sunstein brindó algunos ejemplos de intervenciones exitosas –la preferencia de utilizar energía limpia aunque sea más costosa en Suiza y la adherencia a un programa de alimentación gratuita y saludable para niños y niñas en las escuelas de Estados Unidos– y detalló algunos de los sesgos cognitivos que tenemos las personas:
El sesgo del ahora: Hace que tendamos a dar más peso al presente al tomar decisiones.
La procrastinación: Dejar para mañana lo que se puede hacer hoy.
La inercia: El sesgo cognitivo de status quo que implica preferir como son las cosas en el momento actual.
La sobreconfianza: Consiste en la sobreestimación del éxito de las propias decisiones.
Además, Sunstein introdujo un concepto novedoso al que llamó Sludge, literalmente “lodo” en inglés, y que refiere a todas esas barreras burocráticas que muchas veces los ciudadanos tienen que atravesar para alcanzar un derecho o un beneficio que les corresponde. “Hay que realizar auditorías para conocer ese “fango” y hacerle la guerra. Tenemos que eliminar todos los obstáculos, retirar barreras comportamentales que separan a los humanos de aquello que necesitan”, concluyó.
Cuestionado acerca de si estas herramientas de las ciencias del comportamiento se pueden aplicar en los países en desarrollo o son sólo para los países ricos, la respuesta de Sunstein fue categórica: “Yo diría que los trabajos más interesantes en los próximos 10 años con resultados prácticos van a ser hechos en países en desarrollo y estoy absolutamente esperando que Argentina sea líder en este tema“.
El evento de lanzamiento también contó con la participación del psicólogo David Halpern, CEO del Behavioural Insights Team (BIT) de Reino Unido, y uno de los mayores referentes de las Ciencias del Comportamiento aplicadas a las Políticas Públicas. Halpern contó cómo fue el surgimiento del BIT, la primera Unidad en el mundo en aplicar este tipo de enfoque: “En el 2010 todo parecía un gran experimento, no sabíamos si iba a funcionar, teníamos un plazo de dos años para evaluar si valía la pena la inversión. Afortunadamente y para nuestra sorpresa tuvimos un impacto muy fuerte en el gobierno británico que nos permitió continuar hasta el día de hoy”. A su vez, David Halpern hizo hincapié en la importancia del trabajo del BIT con la irrupción de la pandemia en donde entender el comportamiento humano fue clave para poder diseñar políticas que ayudaran a cambiar los hábitos de las personas como fomentar la utilización de barbijo o mantener distancia social. “Quedó evidenciada la importancia de utilizar una perspectiva distinta, una visión más realista del comportamiento humano”, concluyó.
Por último, el evento de lanzamiento contó con las palabras del Presidente de la Nación Alberto Fernández, quien celebró la creación de la Unidad de Ciencias del Comportamiento y Políticas Públicas y anunció que se abrirá una convocatoria para realizar estudios en el gobierno nacional y también el los gobiernos provinciales y municipales. Luego de exponer acerca de cómo en Derecho Penal la idea histórica de concebir a los hombres y mujeres como seres totalmente racionales ha sido modificada, dió ejemplos en los cuales ya se está aplicando el estudio del comportamiento. El Presidente mencionó el proyecto de etiquetado claro y sencillo de alimentos que se está debatiendo en el Congreso, la devolución del IVA para beneficiarios de la AUH y el Plan Egresar, para que chicos y chicas terminen el secundario. “Lo que pretendemos es ayudar a que las personas tomen mejores decisiones para sí mismas y para el país: Diseñar políticas públicas a la medida del ser humano”, concluyó el Presidente.